Si el trabajo nos impide estar en la casa, habrá que buscar estrategias para estar presentes, aunque sea a la distancia, y fortalecer los momentos en que es sí es posible compartir.

Es necesario darnos el tiempo para llegar a la casa a leer cuentos, pintar, bañarlos, darles la comida, conversar, y/o entender las preocupaciones de nuestros hijos, todo esto dependiendo de la edad. Es fundamental darnos un espacio de tranquilidad y potenciar el encuentro diario con los nuestros aunque sea un ratito, eso es algo que necesitamos tanto por nosotras como por nuestros hijos.

Frecuentemente observo una tremenda capacidad para desarrollar alternativas creativas, respecto de la maternidad. Si como mujeres madres tenemos la confianza interna, y estamos tranquilas podemos ser súper ingeniosas, pero eso requiere de una adecuada autoestima como mamás.

Llamamos a la casa para hablar con nuestros hijos, preguntamos cómo les fue en el colegio, qué hacen, si tienen tarea, si necesitan algo, si están bien. Si son más grandes nos escribimos por whats up, mail, skype u otro elemento de la tecnología, el tema es estar conectadas.

La mamá cercana y confiable es aquella que tiene la capacidad de darse cuenta de lo que siente y necesita su hijo, una preocupación que se manifiesta a pesar de la distancia. Los hijos saben distinguir cuando estamos atentos a ellos.

También veo mamás que se asustan mucho, entran  en pánico y la culpa las paraliza, ahí es necesario una adecuada intervención. Muchas mujeres hoy piden hora a la psicóloga, entre otras cosas, para que se les ayude a manejar mejor la conciliación trabajo maternidad. Una de mis primeras sugerencias es aprender a ¡PARAR!

Si llamo a mi casa toda apurada,  apesadumbrada y abrumada, más que ayudar a mis niños o adolescentes los voy a  angustiar. Para hablar tengo que recuperar serenidad y desde ahí comunicarme con ellos.

Es importante que tengamos presente que el lazo que nos une con ellos es fuerte, profundo, vital. Es fundamental, mantener la comunicación y el seguimiento con las actividades y circunstancias de nuestros hijos. Si a veces no podemos estar todo lo que quisiéramos, nuestro INGENIO Y CALMA serán nuestros mejores aliados.